Habitantes de un caserío ubicado a un lado de la vía de Clarines tienen numerosos problemas, pero su mayor preocupación es vivir en medio de dos canales que se han desbordado antes.
Puerto Píritu.- La comunidad de Santa Cruz, en el municipio Bruzual, se encuentra en medio de dos quebradas, que en varias oportunidades se han desbordado y causado estragos en el sector. Conscientes del riesgo que corren, los vecinos piden a las autoridades que embaulen los caños, porque eso evitará que vuelvan a salirse de su cauce.
El caserío ubicado a un lado de la carretera de Clarines fue fundado hace más de 20 años y actualmente lo conforman unas 100 familias distribuidas en dos calles principales y dos laterales. Cuentan con servicios básicos a medias, es decir, con luz pero sin agua, y con estructuras que se están deteriorando, como el ambulatorio, que no funciona.
Para estas personas lo más urgente es el embaulamiento de las quebradas que los rodean, pues el año pasado las viviendas se inundaron. Aunque en la época de sequía el problema se olvida, cuando llegan las lluvias comienzan las preocupaciones.
La vecina Sandra Ron recordó que el 28 de julio de 2010 su casa prácticamente desapareció, después que se desbordó la quebrada por unas fuertes lluvias que cayeron en la madrugada. “Tratamos de rescatar algunas cosas pero el agua entró y dañó todo”.
En esa oportunidad, otras tres familias resultaron afectadas, y dos de ellas fueron reubicadas en pequeñas habitaciones ubicadas en Clarines, asignadas por el ayuntamiento. Sandra no corrió la misma suerte y se alojó en casa de un pariente en el mismo sector.
Albertina Pancho contó su experiencia, y dijo que es similar a la que vivió en Higuerote, donde residió hasta el año pasado. “Me vine huyendo de los mismos problemas que encontré aquí”.
Aunque la mejor solución es reubicar a todas estas familias, las autoridades locales señalaron que no tienen recursos para construir nuevas casas.
Cueva de murciélagos El ambulatorio rural de Santa Cruz permanece cerrado desde 2005, porque se convirtió en refugio de murciélagos y al caer la tarde siembran el terror en la zona.
Normelis Armas, miembro del Comité de Salud del consejo comunal, señaló que solicitaron al Distrito Sanitario Nº 2, que fumigue el área a fin de evitar que niños y adultos contraigan enfermedades como rabia e histoplasmosis.
Indicó que este año se registraron cuatro casos de dengue en pequeños entre 2 y 8 años, debido a la proliferación de zancudos que desataron las lluvias de julio y agosto.
No comments:
Post a Comment